Cuando se les pregunta por algunos de los escenarios de ocio más buscados en la industria hotelera (y de servicios de comida), relajarse junto a una fogata en sillas Adirondack de gran tamaño bajo un cielo abierto es con frecuencia lo primero de la lista. Estos clientes buscan entornos que sean cómodos y comunitarios, espaciosos y sociales, elegantes y seguros, pero envueltos en un encanto relajante.
¿Por qué Adirondacks?
La silla Adirondack fue diseñada a principios del siglo XX por Thomas Lee, quien creó la primera versión mientras estaba de vacaciones en las montañas Adirondack de Nueva York. Lee quería una silla cómoda para que su familia disfrutara del aire libre, por lo que diseñó un diseño simple con amplios apoyabrazos y un respaldo inclinado, hecho con materiales locales. Hoy en día, es un elemento básico en el mobiliario de exterior y a los aficionados a las actividades al aire libre les encanta su diseño rústico y ergonómico.
Ya sea que estén sentados durante largos períodos de tiempo o tomándose un descanso para disfrutar de una bebida rápida, los invitados aprecian una silla Adirondack bien hecha y cómoda para relajarse. Busque sillas Adirondack hechas de materiales resistentes a la intemperie para mayor durabilidad para uso en exteriores. Se prefieren las opciones livianas, ya que ofrecen una fácil movilidad sin comprometer la estabilidad; se prefieren las sillas de bajo mantenimiento, ya que requieren menos mantenimiento con el tiempo. Hay varias opciones para complementar el estilo de su lugar y el aspecto general de su espacio al aire libre. Elija una exhibición que se adapte al diseño de su fogón y pueda acomodar la cantidad deseada de invitados.
El atractivo estético es importante, pero no a expensas de contar con protocolos de seguridad adecuados. Si bien las mallas mosquiteras, las superficies resistentes al calor y la ventilación adecuada son fundamentales para la seguridad de las fogatas, los usuarios deben asegurarse de que las Adirondacks circundantes estén ubicadas lo suficientemente lejos de llamas abiertas, fuentes de calor o combustible, así como de paneles de control que podrían bloquear el acceso de los usuarios o interrumpir el flujo de tráfico de los invitados.
¿Qué hace que Grosfillex Adirondacks sea diferente?
Las sillas Adirondack de Grosfillex se destacan por varias razones. Fabricadas con orgullo en Pensilvania, la silla Adirondack de Grosfillex combina los beneficios de fácil cuidado y bajo mantenimiento de la resina con la durabilidad y comodidad que se encuentran en materiales más costosos. Si bien su apariencia es clásica, esta silla tiene un asiento más alto y ancho que el Adirondack promedio, lo que hace que sea fácil entrar y salir. Viene completamente ensamblada para disfrutarla de inmediato.
Material:
Fabricado con resina duradera de alta calidad que resiste la decoloración, el agrietamiento y el astillado. Esto contrasta con las opciones de madera tradicionales, que pueden requerir más mantenimiento.
Ligero:
La construcción de resina hace que sean más fáciles de mover en comparación con las sillas de madera más pesadas, sin sacrificar la estabilidad. Tienen el equilibrio perfecto de peso (22 lbs/10 kgs) para resistir vientos fuertes pero mantener la facilidad de manejo.
Resistencia a la intemperie:
Las sillas Grosfillex están diseñadas para soportar condiciones climáticas adversas, lo que las hace ideales para usarlas al aire libre durante todo el año. Consulta nuestra guía de cuidado y almacenamiento de Adirondack aquí.
Opciones de color:
Están disponibles en una variedad de colores, lo que permite la personalización y personalización del espacio.
Libre de mantenimiento:
A diferencia de la madera, estas sillas no necesitan ser selladas ni pintadas con regularidad y son fáciles de limpiar, lo que las convierte en una alternativa de bajo mantenimiento. También son apilables para guardarlas fácilmente fuera de temporada.
Comodidad:
Las sillas Adirondack de Grosfillex cuentan con curvas ergonómicas y ángulos intencionales para un mejor rendimiento funcional. Ofrecen un asiento más ancho, soporte lumbar y están más elevadas del suelo para facilitar el acceso.
Las sillas Adirondack de Grosfillex son una opción práctica cuando se buscan asientos de exterior elegantes y funcionales para adornar un acogedor ambiente de fogata al aire libre.
Fabricando magia
Las sillas Adirondack de Grosfillex se fabrican mediante un proceso de fabricación patentado que enfatiza la durabilidad y la facilidad de mantenimiento. Las Adirondack están hechas de resina de alta calidad, MPC (compuesto de polímero mineral), que logra un acabado espectacular similar a la madera y es fuerte, resistente a la decoloración, el agrietamiento y el daño climático.
La resina se calienta y luego se inyecta en moldes para formar los componentes de la silla. Este proceso permite que los diseños intrincados y la uniformidad literalmente tomen forma. Una vez que se moldea la resina, las piezas se enfrían y se retiran de los moldes, donde se someten a un proceso de acabado para garantizar bordes suaves, coloración uniforme y un aspecto pulido.
A continuación, se ensamblan los componentes para garantizar la máxima estabilidad y durabilidad. Cada silla pasa por un proceso de control de calidad para comprobar si tiene defectos y garantizar que cumple con los altos estándares de la marca.
Finalmente, las sillas terminadas se embalan para su envío en un espacio optimizado y con la máxima atención a la protección durante el transporte.
La colección Westport
Adirondack es la pieza estrella de la colección Westport de Grosfillex. Los clientes pueden estar seguros de que están descubriendo muebles que ofrecen comodidad y estilo entre la silla Adirondack, un banco plegable y mesas bajas complementarias, todas elaboradas con resina duradera, ideales para fogatas, patios y terrazas. La colección Westport aporta un toque de elegancia a su espacio al aire libre.
Cuando desee disfrutar del aire libre, simplemente relajarse o ponerse al día con familiares o amigos, el poderoso Adirondack es una solución de asiento resistente, liviana, cómoda y diseñada para soportar los elementos.
